El albaricoque negro supuestamente apareció como resultado de la polinización accidental del albaricoque con ciruela silvestre en el sur de Asia. Los primeros frutos no diferían en buen gusto, pero los criadores se interesaron en el híbrido y comenzaron a trabajar para mejorar sus características. En el albaricoque Black Prince, criado por científicos ucranianos, el aumento de la resistencia al invierno se combina con excelentes cualidades gustativas de frutas grandes. La variedad es una de las más populares entre los representantes de una cultura híbrida.
Cualquier jardinero quiere que crezca un cerezo en su jardín, incluso si la parcela es muy pequeña. Una excelente opción para los cottagers de verano será plantar cerezas de la variedad Youth. Tiene suficiente resistencia a bajas temperaturas, tiene dimensiones compactas y no requiere polinizadores. Para tal árbol, siempre puede encontrar un lugar, incluso en la parcela más pequeña, en verano para tener frutas jugosas, refrescantes y saludables.
Los jardineros rusos aman y cultivan cerezas voluntariamente, lo más importante, para permitir las condiciones climáticas. Los criadores trabajan incansablemente para desarrollar nuevas variedades resistentes al invierno de este cultivo. No hace mucho tiempo, hace poco más de veinte años, se probó una nueva variedad de cerezas de la selección rusa, llamada Chocolate Girl. Las excelentes cualidades de consumo de la fruta y su resistencia a las bajas temperaturas fueron muy apreciadas por los amantes de esta cultura.